Cuando pensamos en la seguridad de nuestro hogar o negocio, la puerta del garaje a veces puede pasar desapercibida. Y es mejor que no sea así, ya que tiene un papel clave a la hora de proteger nuestro espacio, y lo que hay en él.
Si estás pensando en cambiar tu puerta de garaje, o quieres instalar una en una nueva vivienda o local, seguro que te has hecho esta pregunta: ¿Es más segura una puerta automática o una manual? Hoy vamos a aclarar esa duda de forma sencilla, sin tecnicismos, para que sepas qué opción puede encajar mejor contigo. En Rodrigo Espada somos fabricantes de puertas de garaje en Zaragoza, desde 1965. Y además de asesorarte sobre esto, también te daremos algunos consejos para mejorar la seguridad de cualquier tipo de puerta.
Más que el precio y el diseño. La seguridad también es un factor que hay que tener muy presente a la hora de saber si es mejor una puerta de garaje manual o automática para tu vivienda, comunidad o local.
Comparativa de seguridad: puertas de garaje automáticas vs manuales
Una de las dudas más frecuentes que tienen nuestros clientes es si es más seguro optar por una puerta automática o una manual. Ambas tienen ventajas y pueden ser adecuadas según el uso y el entorno. Sin embargo, es cierto que si hablamos de manera exclusiva de seguridad, hay ciertos aspectos que hay que tener claros. Para ayudarte en tu elección, aquí tienes una breve y sencilla comparativa sobre qué nivel de protección ofrece cada tipo de puerta de garaje.
Puertas automáticas
Las puertas de garaje automáticas, como su nombre indica, se abren y se cierran solas con solo pulsar un botón en el mando a distancia. Lo interesante es que no solo aportan comodidad, sino que también incorporan tecnologías de seguridad que marcan la diferencia, como sensores que detectan si hay algo o alguien en el paso, motores que bloquean la puerta una vez cerrada, y sistemas de apertura codificados que evitan manipulaciones desde el exterior. Incluso, muchas de ellas llevan luces de aviso o señales acústicas que alertan cuando se está moviendo.
Todo esto hace que sean no solo prácticas, sino también mucho más seguras ante robos, accidentes o despistes.
Puertas manuales
Las puertas de garaje manuales, en cambio, funcionan sin automatización. Su apertura y cierre dependen totalmente del usuario, lo cual puede ser una ventaja en cuanto a simplicidad, pero también conlleva algunos riesgos si no se utilizan de forma correcta. Al no tener sensores ni bloqueos automáticos, existe mayor posibilidad de que se quede mal cerrada, o que se produzcan golpes o accidentes si alguien no la manipula con cuidado. Y si no cuenta con un buen sistema de cierre, puede ser más vulnerable ante intentos de forzado.
Dicho esto, también es cierto que una puerta manual bien instalada y con un uso responsable ofrece un buen nivel de seguridad, sobre todo si se le añaden algunos complementos o se revisa con cierta frecuencia.
Características de seguridad en las puertas de garaje automáticas
Hoy en día, las puertas automáticas han avanzado mucho. No solo por comodidad, sino porque incluyen varias funciones, pensadas de forma específica, para proteger.
Estas son algunas de las más importantes:
- Sensores de presencia o fotocélulas. Detectan si hay alguien o algo en el paso y evitan que la puerta se cierre encima. Muy útil si hay niños pequeños o animales.
- Paro automático ante obstáculos. Si algo impide que la puerta se cierre, el motor se detiene o incluso invierte el movimiento. Esto ayuda a prevenir accidentes.
- Bloqueo del motor al cerrarse. Muchas puertas automáticas se bloquean solas al llegar al suelo, lo que dificulta que alguien pueda forzarlas desde fuera.
- Mandos a distancia con código seguro. Los mandos actuales tienen sistemas que cambian el código cada vez que se usan, evitando duplicaciones o accesos no autorizados.
- Avisadores luminosos y acústicos. Al abrir o cerrar, la puerta suele emitir una señal visual o sonora para avisar a quienes estén cerca.
- Cumplimiento de normativas. Las puertas automáticas deben cumplir con ciertas normas de seguridad, como la UNE-EN 13241-1, lo cual garantiza una instalación segura y legal.
Estas características no solo hacen que la puerta sea más segura, sino también más cómoda de usar en el día a día.
Riesgos asociados con las puertas de garaje manuales
Aunque las puertas manuales siguen siendo bastante frecuentes, en especial en comunidades pequeñas o viviendas unifamiliares, es importante saber que hay algunos riesgos asociados:
- No detectan obstáculos. Si alguien está pasando y la puerta se cierra, no hay sensores que eviten un golpe.
- Dependencia del usuario. Si no se cierra bien o se olvida con la llave puesta, puede quedar desprotegida frente a robos.
- Mayor esfuerzo físico. Requieren empujar o levantar manualmente, lo que puede ser incómodo o incluso peligroso para personas con movilidad reducida.
- Falta de bloqueo automático. Una puerta manual no se bloquea sola, lo que la hace más vulnerable si no se asegura bien.
No significa que sean inseguras por completo, pero sí que requieren más atención y mantenimiento para que realmente protejan como deberían.
Consejos para mejorar la seguridad de cualquier tipo de puerta de garaje
Tanto si ya tienes una puerta de garaje instalada como si estás pensando en cambiarla, estos consejos te pueden ayudar a ganar tranquilidad:
- Haz revisiones periódicas. Revisa cada cierto tiempo que la puerta abre y cierra correctamente, y que no hay piezas desgastadas o sueltas.
- Instala cerraduras de calidad. En el caso de puertas manuales, una buena cerradura es clave para evitar que puedan forzarla fácilmente.
- Añade sensores si es posible. Algunas puertas manuales pueden adaptarse con sensores o elementos de seguridad adicionales.
- Protege el mando a distancia. Si usas una puerta automática, evita dejar el mando a la vista o en el coche. Es como dejar la llave del garaje puesta.
- Asegúrate de cumplir con la normativa. Si tienes una puerta automática, debe cumplir con las normas actuales (como el marcado CE y UNE-EN 13241-1). Esto es especialmente importante en comunidades de vecinos o garajes colectivos.
- Confía en profesionales. Una instalación bien hecha es la mejor garantía de seguridad. No es solo una cuestión de comodidad, sino de proteger tu hogar o tu negocio.
¿Y tú, qué puerta necesitas? En Rodrigo Espada llevamos más de 60 años ayudando a nuestros clientes a elegir la mejor solución para su garaje. Fabricamos, instalamos, reparamos y automatizamos todo tipo de puertas, ya sea para viviendas, negocios o comunidades. Si tienes dudas, estaremos encantados de ayudarte.
